República Contaminada


Las enfermedades del Magdalena

El río Magdalena es una del as arterias naturales de Colombia, en el cual se han vivido grandes historias, fuente de riqueza económica, cultural y ambiental, que a la vez es símbolo de la degradación y contaminación a que están expuestos los recursos hídricos del país.

El artículo explica las problemáticas socioambientales y socioecómicas derivadas del mal manejo que se la ha dado a través de los años, tomando como ejemplos distintos aspectos: Pesca, hidroenergía, Minería, infraestructura, manejo de la ola invernal. Y mostrando que uno de los elementos que quizá dieron origen a la dramática realidad y la situación actual del Magdalena es la falta de planeación y visión del manejo integral de la cuenca, que es pensar los recursos hídricos en el corto, mediano y largo plazo.

A continuación a partes del artículo:

Durante la pasada ola invernal las descargas del río llegaron a los 18.000 metros m3/s inundando más de un millón de hectáreas adicionales a las periódicas, con un costo para los colombianos que puede estar cercano al 3% del PIB. Las inundaciones sucedieron en gran medida por la pérdida de sus hábitats, desecación de ciénagas y afectación de sus planicies. Si seguimos obstinadamente desecando la Depresión Momposina, La Mojana y la Zapatosa, si seguimos taponando conectividades entre sus humedales para ganar unas hectáreas para agricultura o ganadería, perderemos el sistema más eficaz de mitigación de inundaciones y el río inundará otras zonas, generando costos que pagaremos todos. ¿Qué tal un gran proyecto para recuperar humedales, ciénagas, meandros y rondas del río? Sería más barato, más costo efectivo en el largo plazo.

Si no empezamos a pensar en la integralidad, no sólo no maximizaremos los beneficios de la cuenca, sino que arriesgamos aquellos que nos brinda sin costo como la purificación del agua (única empresa de alcantarillado que no cobra por su servicio), pesca, amortiguación de crecientes, retención de sedimentos, enriquecimiento de suelos en planicies inundables, entre otros.
Todos estos bienes y servicios no se visibilizan en la contabilidad nacional, no están incluidos en las grandes discusiones nacionales. Se favorecen las decisiones de corto plazo con grandes inversiones en infraestructura gris. Si se le diera una oportunidad a la inversión en la infraestructura verde como parte de la solución, tendríamos un mayor retorno a la inversión, un ambiente mejorado, una sociedad más rica, más próspera. ¿Por qué no hacerlo?


Fuente: Artículo “Las enfermedades del magdalena” Por: José Yunis, Representante para Colombia de The Nature Conservancy. Elespectador.com



Guajira “nada” en agua, carbón y plata.

El artículo desnuda la situación actual de La Guajira, una de las regiones más ricas en recursos energéticos del país, mostrando las distintas situaciones y perspectivas generadas por los conflictos ambientales asociados a la explotación minera.

Conflictos ambientales derivados de dos megaproyectos entre los cuales está la desviación del Río Rancherías para aumentar la producción de carbón en el Cerrejón, no solo vistos desde el factor ecológico sino también económico, político, social y cultural.

Da cuenta de algunas de las razones por las cuales la comunidad indígena (Wayú) y las ONGs no están muy contentas: El agua y las regalías.

A continuación a partes del artículo:

 sic. En La Guajira, donde más del 80 por ciento del territorio es desértico, el agua es más preciada que el carbón. Los dos megaproyectos mineros han despertado el temor de perder la poca que tienen. El Cerrejón ha planteado desviar 26 kilómetros del principal río de la región: el Rancherías, pues bajo su cauce se encuentran enterradas 500 toneladas de carbón.

Aunque el presidente de la compañía, Roberto Junguito, dice que ese es un proyecto a largo plazo, y que si empieza no sería antes del 2016, la magnitud de la propuesta ya ha generado cntroversia. "Desviar un río es un proyecto muy complejo y en el mundo hay experiencias buenas y malas", dice Arcesio Romero, director de Corpoguajira, la CAR local. Un grupo de indígenas incluso ya envió una carta al presidente Juan Manuel Santos pidiéndole que no vaya a permitir la desviación del río.

Por otro lado, el hallazgo del otro yacimiento por MPX, la empresa de Batista, considerado por Forbes el segundo hombre más rico de America Latina, también despierta temor. Una de las razones es que esta empresa también tiene tierras cerca al manantial de Cañaverales, un nacimiento de agua dulce donde los indígenas hacen su pagamento.

Por eso La Guajira hoy es una tierra de contrastes. La gran bonanza del carbón que se avecina tiene a muchos muy contentos y a otros muy divididos. En últimas, este departamento simboliza el desafío que tiene Colombia frente al auge de la locomotora minera y tiene todos los elementos para ser quien mejor realice esta transición.


Fuente: Artículo “Guajira 'nada' en agua, carbón y plata”. Por: Por Cristina Castro, periodista de SEMANA